10 de septiembre de 2012

todo saldrá bien

Vamos a empezar a hablar sobre la distancia, sobre los kilómetros que nos separan, a mi y al resto del mundo... no exactamente del mundo pero si de mi mundo.
Cuando por fin crees conseguido tu sueño viene otro y se pone por delante, cuando aun no has acabado de conseguir lo que más querías en este mundo viene otra cosa y se convierte en lo que mas quieres, y cuando también la consigues, como nunca, nunca de verdad puede estar todo pefectamente bien, siempre aparece un problema de por medio. Entonces viene, que cuando más ganas tengo de tumbarme encima tuya y ver las horas pasar desde los escasos centímetros que separan tus ojos de los míos, tu boca de la mía, bueno... tu sonrisa, entonces es cuando tenemos de por medio exactamente 1104.593 km y entonces es como que el mundo se viene abajo pero tu y yo, típico en las películas aguantamos, aguantamos la distancia, aguantamos las ganas de vernos y todas esas cosas ñoñas que salen siempre con finales felices aunque realmente todos sabemos que no es así. La pregunta viene cuando, si sabemos que el final será malo... bueno... dejemoslo en que no sera bueno, por qué lo empezamos?


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