14 de abril de 2012


Que más dará si llegas hoy tarde a casa, que mas dará si hoy lo dejas todo y me eliges a mi, me dedicas todas las horas de la tarde de hoy, que mas da si llueve, si te mojas, si me mojo, si te salpico con un charco y se te mojan los pantalones, que más da si tenemos que subir a tu casa porque te gotean los zapatos, que mas da si tienes frío y sin que tu me lo pidas yo te abrazo, y si luego te tumbas del cansancio en la cama, y si me tumbo a tu lado, y si sonrió disimuladamente y tu lo haces a la vez y te giras y me dices que, bueno, que las decisiones que se toman a veces se dejan cosas que te gustan por el camino pero como recompensa te regala otras, sonrisas que jamás hubieras probado si te hubieras quedado con lo de siempre, con la rutina de cada día, sin incluirme a mi, precisamente en tus fines de semana, en tu salida del instituto, en tus sueños, incluso en tus fantasías.
Hablo de conectarte al chat y ver un "hola" acompañado de cualquier nombre ridículo y a la vez cariñoso, hablo de tener a una persona constantemente para ti y solo para ti, hablo de confianza, de sonrisas gratis, de días y días con tus manos sobre mis espalda, quitándome el sujetador, quitandome la ropa, quitandome las vergüenzas, los complejos, hablo de la libertad de besarme donde y cuando quieras, hablo de tener una mano donde agarrarte, hablo de un abrazo cuando las cosas no van del todo bien, un apoyo constante, hablo de acostarte pensando en mi y levantarte con ganas de verme, hablo de cenar juntos los sábados y derrochar el dinero en condones.

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